A pesar de que la mejor época para visitar los fiordos noruegos son los meses de verano, para ver ese verde intenso que ofrece la naturaleza en estas tierras, en mi cabeza siempre había imaginado los fiordos noruegos en invierno, cubiertos de nieve.
Disponía de un fin de semana largo y decidí hacer una pequeña ruta por Noruega: Oslo, Bergen y los famosos fiordos.
✅ Excursión a los fiordos noruegos
✅ Paseo en lancha rápida por los fiordos noruegos
✅ Tour privado en Stavanger con guía en español
Índice
1. Qué son los fiordos noruegos
Para aquellos, que como yo antes de hacer este viaje, no sepan lo que es exactamente un fiordo os diré que «son brazos prolongados de los mares, que a menudo alcanzan grandes distancias tierra adentro, con acantilados alzándose a ambos lados del fiordo».
Se formaron cuando los glaciares se retiraron y el agua de mar inundó los valles en forma de U. Los fiordos noruegos no se congelan debido a la cálida corriente del Golfo y a las corrientes de aire causadas por el efecto Coriolis, por lo que es posible navegar por los fiordos noruegos en invierno.
2. Recomendaciones para viajar a los Fiordos Noruegos en Invierno
Los inviernos en Noruega son muy duros, por lo que es muy importante elegir adecuadamente que ropa llevar a un crucero por los fiordos para no congelarse.
Tendréis que ir forrados de arriba a abajo con guantes, camisetas y mallas térmicas, bufanda, gorro, jerséis gruesos y botas de goretex con suela antideslizante. El clima es muy inestable por lo que también es recomendable llevar paraguas y chubasquero.
Si vais a alquilar coche para recorrer los fiordos noruegos en invierno muchos tramos de montaña pueden estar cerrados, por las malas condiciones climatológicas. Es recomendable que os informéis bien antes de vuestro viaje para evitar imprevistos.
Aunque los barcos son muy grandes y bastante estables, siempre es recomendable llevar alguna pastilla para el mareo.
Si disponéis de tiempo, tratad de escaparos al Norte del país, pues el invierno es el momento idóneo para contemplar las auroras boreales.
3. Cómo recorrer los Fiordos Noruegos en invierno
Hay varias opciones para visitar los fiordos noruegos, en un crucero de varios días o por vuestra cuenta.
3.1 Crucero Turista
Es el típico crucero en el que te pasas más rato sobre el mar que sobre la tierra. Os llevará a los pueblos principales y, muy probablemente, a algún otro país escandinavo. Estos cruceros por los fiordos noruegos solo están disponibles en los meses de verano.
3.2 Crucero Hurtigruten
Es un barco de correos reacondicionado para llevar también a pasajeros. Si os queréis adentrar un poco más en los fiordos este barco os llevará a muchos más pueblos, además de estar menos abarrotado de turistas.
La ruta comienza en Bergen, acaba en Kirkenes y vuelve a Bergen. El trayecto de ida tiene una duración de 7 días, mientras que el de ida y vuelta dura 11.
3.3 «Norway in a nutshell»
Si queréis hacer el recorrido por vuestra cuenta, y ver los fiordos en 1 o 2 días para poder seguir recorriendo otros puntos del país, esta es vuestra mejor opción.
Aquí es posible realizar diferentes itinerarios, que podéis personalizar en su web. Hay diferentes puntos de partida, pero el trayecto que os voy a contar es el que yo elegí.
Podéis realizar la compra online o en cualquier oficina de turismo de Noruega. Si vais en verano es mejor que lo reservéis con antelación, pero si vais a los fiordos noruegos en invierno ¡tranquilos! solo van 4 locos como yo, así que tendréis sitio de sobra.
Eso sí, el precio del crucero por los fiordos noruegos de un par de horas (en temporada baja) os costará unos 150€ por persona, pero os aseguró que no os vais a arrepentir.
Mi itinerario por los fiordos Noruegos en invierno
Esta fue la ruta que yo elegí:
08:43 Salida en Tren desde Bergen
09:56 Bajada en la estación de Voss
10:10 Bus a Gudvangen
11:05 Llegada a Gudvangen
12:00 Barco desde Gudvangen hasta Flåm
14:00 Llegada a Flåm
14:40 Tren de Flåm hasta Myrdal
15:30 Llegada a Myrdal
15:43 Tren de regreso a Bergen
17:57 Llegada a Bergen
Aquí os dejo el mapa del recorrido de la excursión de los fiordos noruegos de Norway in a Nutshell.
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Mi amiga Sandra, que me acompañaba en este viaje, me quería matar al ver la cantidad de transportes que teníamos que coger. Pero no os preocupéis, las vistas son espectaculares y vale totalmente la pena. Además, todos los transportes están muy bien coordinados y son súper puntuales. Y aunque parezca un lío, es imposible perderse, porque lo encontraréis todo perfectamente indicado.
La primera parte del trayecto de Bergen a Voss la hicimos en un tren normal tipo cercanías. Era sábado y estaba lleno de niños que iban de excursión a las pistas de esquí de algún pueblo cercano.
En Voss, tomamos un bus que nos llevó a Gudvangen por la carretera nueva. En verano, este trayecto se hace por la carretera Stalheimskleiva, con parada incluida para contemplar el paisaje. Esta carretera tiene unas bonitas vistas a las cascadas Sivlefossen y Stalheimsfossen.
Aún así, a mi me encantó ver un montón de pueblecitos con las típicas casitas noruegas de madera de miles colores cubiertas de nieve y rodeadas de árboles que se hundían en un perfecto manto blanco.
Al llegar a Gudvangen tuvimos casi una hora para disfrutar del paisaje, comprar algún souvenir y tomar un café bien calentito en su restaurante.
Os aseguro que, a pesar del frío, la espera se me hizo corta.
#MundoMundialTip: tratad de ser los primeros en la cola antes de subir para poder coger sitio en el ventanal de adelante que es donde tendréis las mejores vistas.
Durante todo el recorrido, una grabación en diferentes idiomas os irá explicando los pueblecitos como Undredal, Viksdalen o Aurland y los fiordos que estáis atravesando en cada momento.
El fiordo de los Sueños
El barco no pasa por el centro del Fiordo Sognefjord, el conocido «fiordo de los sueños», sino por uno de sus brazos, llamado fiordo Nærøyfjord, que es uno de los más estrechos y, tal vez, el más espectacular fiordo de Europa, con 204 kilómetros de longitud y 1038 metros de profundidad.
Aunque dentro se estaba bien calentito, salí a cubierta a ratitos para disfrutar del espectacular paisaje y hacer muchas fotos. Lo bueno de visitar los fiordos noruegos en invierno es que estaréis prácticamente solos en la cubierta del barco.
Resultaba muy curioso el contraste de la nieve cayendo sobre el mar y la paz que se respiraba navegando en medio de la naturaleza.
Nuestro barco atracó en el puerto de Flam, una pequeña localidad perteneciente al municipio de Aukland, situada en el fiordo de Aurlandsfjord (el brazo más al interior del Sognefjord). Este pueblo solo tiene 500 habitantes.
Más allá del pequeño puerto de Flam, los puntos de interés turístico son escasos. El pueblo cuenta con un centro de recepción de turistas, algunas cafeterías, tiendas de souvenirs y el Museo del ferrocarril. Aunque si vais a los fiordos noruegos en invierno, encontraréis pocas cosas abiertas.
Si tenéis tiempo y dinero, y queréis paz absoluta en un entorno inmejorable os recomiendo que paséis una noche en el puerto de Flam. Sólo hay 3 hoteles pero sus precios son muy similares, unos 150 € la noche en temporada baja. Así que puestos a pagar, lo mejor es alojarse en el histórico Hotel Fretheim que comenzó siendo una granja donde se alojaban los pescadores de salmón y terminó siendo un lujoso hotel, en el que merece la pena entrar aunque solo sea unos minutos mientras esperáis el tren de Flam.
Para mi gusto, se quedaron un poco cortos los 40 minutos de parada en esta localidad, ya que la belleza del paisaje de Flam, rodeado de montañas y cascadas me atraparon totalmente.
Tren de Flam
Pero había que continuar el viaje y el Flamsbana nos esperaba, un tren muy acogedor con un interior de madera que te transporta a otra época, si no fuera por las modernas pantallas LCD informativas que te van explicando el trayecto, mientras contemplas los espectaculares paisajes.
El tren de Flam conecta Flam con Myrdal. Este trayecto dura aproximadamente una hora y, es que a pesar de ser solo 20 km de recorrido, pasa de 0 a 866 metros sobre el nivel del mar, atravesando 2o túneles. Para poder recorrer este tramo tan inclinado, con pendientes del 6%, el tren tiene dos locomotoras una delante y otra detrás que lo va empujando.
El tren va parando en diferentes puntos para que los pasajeros puedan observar puntos clave de este recorrido a través de las ventanas. Hay una parada en la que podréis bajar unos 10 minutos: la cascada Kjosfossen, de 225 metros de caída. Si visitáis los fiordos noruegos en invierno esta cascada estará congelada.
Durante este viaje podréis contemplar ríos que atraviesan profundos barrancos, lagos y cascadas que se precipitan desde empinadas montañas cubiertas por un manto de nieve. Por algo fue nombrado el viaje en tren más increíble del mundo, en 2014, por Lonely Planet.
El Tren de Flåm llega a su final en Myrdal, donde podréis realizar la conexión con los trenes que van hacia Oslo y Bergen.
Aunque el viaje habrá terminado, estos increíbles paisajes quedarán para siempre en vuestra memoria.
Esperamos os haya gustado nuestro post de Crucero por los Fiordos Noruegos en invierno. ¿Os atreveríais a viajar en esta época del año? Podéis contarnos vuestras experiencias o preguntarnos cualquier cosa a través de los comentarios.
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